La segunda regla de oro para el cuidado de los riñones de la que vamos a hablar es: Controla los niveles de azúcar en sangre.
¿Por qué el control de azúcar en la sangre es tan importante para mis riñones?
Controlar los niveles de azúcar en la sangre es fundamental para el cuidado de los riñones, ya que la diabetes no controlada puede perjudicar estos órganos; la diabetes es una condición que afecta como nuestro cuerpo procesa el azúcar. Cuando los niveles de azúcar en sangre se encuentran elevados por largos periodos de tiempo afecta la capacidad de filtrado de los riñones; lo cual puede llevar a una persona a padecer de una condición llamada nefropatía diabética, la cual es una de las principales causas de insuficiencia renal en el mundo.
¿Cómo afecta la diabetes a los riñones?
Cuando se tiene la azúcar alta, el cuerpo intenta eliminar el exceso a través de la orina. Lo que le genera mayor presión a los riñones, pues trabajaran arduamente para filtrar la sangre y eliminar así el exceso de glucosa. Con el pasar del tiempo el esfuerzo extra que están realizando los riñones puede dañar los vasos sanguíneos de éstos, reduciendo así su capacidad de filtrar la sangra de manera eficiente.
Efectos de la nefropatía:
- Hipertensión: cuando los riñones están dañados estos pueden presentar dificultad a la hora de regular la presión arterial, aumentando así de sufrir de hipertensión.
- Anemia: los riñones también son los responsables de la producción de la eritropoyetina, hormona que estimula la producción de los glóbulos rojos y la nefropatía diabética puede afectar a la producción de la misma, ocasionando así que la persona sufra de anemia.
- Acumulación de los residuos: cuando los riñones están dañados estos no pueden eliminar adecuadamente los productos de desecho, lo que ocasiona que estos se acumulen en el cuerpo y aparezcan síntomas como la fatiga, náuseas y pérdida de peso.
- Insuficiencia renal: cuando el caso es grave, la nefropatía diabética puede llevar al paciente a sufrir de insuficiencia renal, enfermedad que para ser tratada requiere de diálisis o trasplante de riñón.
¿Qué puedes hacer para proteger tus riñones?
- Mantén tus niveles de azúcar en sangre bajo control: Sigue las indicaciones de tu médico o endocrinólogo para controlar la diabetes. Esto incluye tomar tus medicamentos, seguir una dieta saludable y hacer ejercicio regularmente.
- Monitorea tu presión arterial: La presión arterial alta también puede dañar tus riñones. Tu médico te ayudará a controlar tu presión arterial mediante cambios en el estilo de vida y, si es necesario, medicación.
- Realízate exámenes de orina regulares: Estos exámenes pueden detectar signos tempranos de daño renal.
- Consulta a tu médico regularmente: Tu médico puede monitorear tu salud renal y ayudarte a prevenir complicaciones.
¿Se puede prevenir la nefropatía diabética?
Si, la nefropatía diabética es una condición que podemos prevenir y tratar en sus etapas iniciales. Si mantienes un estilo de vida saludable y sigues las indicaciones de tu médico, podrás proteger tus riñones y mantenerlos sanos por muchos años.